Ballet de Lorraine
Static Shot (Maud Le Pladec) / Malón (Ayelén Parolin). Pero… ¿esto qué es? ¿Danza? ¿Coreografía? ¿Desfile de moda? ¿Moda y danza? ¿Voguing? ¿Clubbing? ¿Posmodernidad? ¿Sátira o apología? ¿Exhibicionismo? ¿Postureo, tal vez? ¿Una performance? ¿un ritual performativo? ¿una marcha militar? ¿un festín futurista? ¿será que es una manifestación en directo de la Inteligencia Artificial?… Podría decirse que es un poco de todo eso. Pero lo cierto es que Static Shot, de Maud Le Pladec, tiene en su ambigüedad la virtud.
No deja indiferente a nadie. Si odias la artificialidad plástica del mundo de la moda y la danza fría e inexpresiva siempre podrás verla como una crítica feroz pero, si por el contrario, es lo que te gusta y excita, podrás identificarte y amarla. Y todos tan felices. Ahí radica su acierto.
Le Pladec, creadora francesa que montó para el Ballet de Lorraine esta coreografía cuando aún no sabía que estaba llamada a ser la directora del colectivo francés, cargo que ocupará a inicios del año entrante, ha diseñado la pieza como un insólito ritual urbanita con claras referencias al desfile de moda, en complicidad con la diseñadora Christelle Kocher KOCHÉ, que creó 24 trajes, uno diferente para cada bailarín.
No hay una premisa dramatúrgica concreta. La pieza es un bloque sin fisuras que presenta a dos docenas de bailarines fríos, desapegados y exquisitos que desfilan, caminan, bailan, interactúan, defienden, subsisten y resisten su permanencia en el escenario. No hay tampoco conflictos ni crisis emocionales. Bien podría ser una pieza de Merce Cunningham, si el genio norteamericano viviera en nuestro tiempo y tuviera veinte años.
Coincidiendo con el tono coral, desenfadado y colectivo, la compañía de Nancy, hasta ahora bajo dirección de Petter Jakobsson, nos presenta en esta misma velada Malón, de la creadora argentina afincada en Bruselas Ayelén Parolin. Se trata de la primera vez que la artista dispone de un equipo grande de bailarines y justamente aborda en su pieza el caos que puede significar un montón de gente junta en un espacio. De hecho, el término malón
en Argentina se usa para referirse a una irrupción inesperada y desordenada de muchas personas en un lugar. Ella cree que un simple movimiento puede ser viral y contagioso, que puede difuminarse por todos lados con consecuencias efecto mariposa, y aquí lo aborda desde los contrastes entre orden/desorden, reptición/transformación, jugando con distintas posibilidades hasta convertirlo en algo verdaderamente muy complejo.
Fecha
11/09/2024Del viernes 15 de noviembre de 2024 al sábado 16 de noviembre de 2024
Horario: a las 20:00 horas.
Lugar de celebración
- Dirección
- CALLE CONDE DUQUE, 9 (y 11) 28015 MADRID
- Madrid
- España
- Barrio / Distrito
- UNIVERSIDAD / CENTRO
Precio
22 euros
El Ballet de Lorraine, con sede en la Ópera de Nancy, fue fundado en 1969 por Jean-Albert Cartier & Hélène Traîline, y es de las pocas agrupaciones de ballet francesas que nacieron con vocación exclusiva por la danza contemporánea. Esa ha sido siempre su naturaleza y hoy, ya convertido en Centro Coreográfico Nacional francés, atesora un repertorio que incluye a los grandes representantes de la modernidad del siglo XX, desde Graham o Cunningham, pasando por estrellas locales como Dominique Bagouet, Jean-Claude Gallotta o Angelin Preljocaj, además promoviendo constantemente la nueva creación con espíritu vanguardista, como confirma este programa que presentan en Madrid.
Organización
Conde Duque