Baraja española de 48 naipes
En un país en el que tenemos tanta tradición en los juegos de cartas, no podía estar ausente de la colección de nuestro museo una baraja española de naipes, que se erigiera en una pieza representativa de toda la apasionada afición de un pueblo hacia un entretenimiento singular. Un entretenimiento en el que la evasión, y hasta la ludopatía, se han aliado durante siglos con la audacia, el azar, la inteligencia y la estrategia, para llegar a hacer de los naipes el juego nacional, al que muchos españoles y, entre ellos, varias generaciones de monarcas, dedicaron un tiempo muy importante de sus vidas cotidianas.