Una casa que arde
Los equipos de la Biblioteca Histórica y La Gran presentan esta exposición con obra de Elisa Terroba y ejemplares destacados del fondo antiguo de la institución.
En Una casa que arde, Elisa Terroba lee la Biblioteca Histórica desde la contemporaneidad y entiende los libros como explosión y expansión hacia un pensamiento crítico, estableciendo puentes entre pasado y presente, y produciendo nuevas lecturas de la tradición. Un proyecto que permite visualizar y difundir el origen, los fondos y los objetivos de la Biblioteca Histórica Municipal en paralelo a algunas cuestiones que subyacen en el trabajo de la artista.
Con esta exposición, la Biblioteca Histórica dota de singularidad a su espacio expositivo abriendo nuevas posibilidades de diálogo entre las obras de Elisa Terroba, artista plástica contemporánea enraizada en el mundo del libro, y algunos ejemplares sobresalientes de su fondo antiguo.
El título de la exposición nos transporta a Fahrenheit 451, conocida novela del escritor norteamericano Ray Bradbury, escrita en 1953:
Tiene que haber algo en los libros, cosas que no podemos imaginar para hacer que una mujer permanezca en una casa que arde
.
La exposición guarda relación con el comienzo de una barbarie: la de la quema de libros y la sepultura de ideas. Con ficciones distópicas, pero también con realidades pasadas y actuales. Con el hecho de que el conocimiento termine por ser un sedimento.
Una casa que arde emplea el libro como extensión discursiva del arte, trazando relaciones entre la historia y la ficción artística, en un intento por entender la compleja y frágil construcción de la memoria histórica.
La muestra conjunta, de recorrido breve, pero intenso, pretende activar mediante el trabajo de Elisa Terroba un diálogo conceptual con los fondos de la Biblioteca Histórica Municipal haciendo hincapié en la censura en los libros, la destrucción de la memoria, el deterioro de los mismos, la traducción literaria y el papel del arte como herramienta antropológica y reflexiva.