Plan de Calidad del Aire y Cambio Climático - Diario Madrid
¿Qué es el Plan A?
El Plan A es el Plan de Calidad del Aire y Cambio Climático del Ayuntamiento de Madrid. Es el Plan A porque afecta al "aire" que respiramos y porque no hay plan B: son las medidas necesarias para conseguir una ciudad sostenible que garantice la salud de los madrileños frente al reto de la contaminación y fortalezca la ciudad frente a los impactos del cambio climático.
¿Cuándo va a pasar?
Nos marcamos dos horizontes: 2020 para la implementación de medidas estructurales y tecnológicas concretas que resulten en una significativa reducción de emisiones exigida por la normativa de calidad de aire; y un horizonte a más largo plazo, 2030, para la necesaria regeneración urbana, transición energética, renovación del parque de vehículos y consolidación de un modelo de ciudad de bajas emisiones que permita la consecución con garantías del conjunto de objetivos del Plan A.
Haciendo click en el vídeo o en este enlace puedes ver por qué la otra opción, no es plan.
¿Por qué es necesario este Plan?
El objetivo principal es garantizar la calidad del aire que respiran los madrileños y madrileñas para fortalecer la ciudad frente a futuros impactos climáticos. Porque actuar en calidad del aire y cambio climático es una prioridad en el ámbito de la salud pública y genera efectos positivos. Porque los estudios científicos y los análisis de políticas en estas materias demuestran que necesitan un tratamiento conjunto y una política de gestión coherente e integrada. Y porque un nuevo modelo de ciudad ‘bajo en emisiones’ exige una acción combinada sobre la movilidad, el urbanismo, y la gestión de la energía y los recursos.
Objetivos específicos
- Cumplir la legislación europea y nacional en materia de calidad del aire.
- Alcanzar niveles de calidad del aire para partículas en suspensión (PM) según las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud.
- Conseguir una reducción en el año 2030 superior al 40 % de las emisiones totales de gas de efecto invernadero (GEI) del municipio de Madrid respecto al año 1990, contribuyendo a los objetivos del Acuerdo de París y la Agenda Climática de la UE, y en línea con la nueva Alianza de Alcaldes para el Clima y la Energía.
- Cumplir el compromiso de reducción del 50 % de las emisiones causadas por la movilidad urbana en 2030 con respecto a 2012.
- Disminuir la vulnerabilidad urbana frente a los riesgos asociados al calentamiento global.
¿Cuáles son las medidas?
1. Área Central Cero Emisiones |
2. Reforma de las principales vías de acceso al centro |
3. Prioridad para los peatones |
4. Mejora y ampliación de la red ciclista |
5. Ampliación de BiciMAD y coordinación con el Consorcio Regional de Transportes |
6. Regulación del aparcamiento con criterios de calidad del aire |
7. Limitación de la velocidad en los accesos metropolitanos y la M30 |
8. Red de aparcamientos intermodales en la corona metropolitana |
9. Vías preferentes y priorización semafórica para autobuses |
10. Infraestructuras reservadas para transporte público |
11. Ampliación y renovación de la flota de la EMT |
12. Incentivos para una flota de taxis de bajas emisiones |
13. Optimización del servicio del taxi con criterios ambientales |
14. Optimización de la distribución urbana de mercancías |
15. Distribución urbana de mercancías con vehículos de bajas emisiones |
16. Innovación y eficiencia en los procesos logísticos urbanos |
17. Renovación del parque circulante |
18. Flotas de servicios municipales de bajas emisiones |
19. Planes de movilidad laboral sostenible |
20. Red de recarga para vehículos eléctricos y suministro de combustibles alternativos |
21. Impulso a las iniciativas de movilidad compartida |
22. Regeneración y rehabilitación de barrio |
23. Fomento de sistemas de climatización eficiente de bajas emisiones |
24. Generación distribuida y uso de energías renovables |
25. Reducción de emisiones en la gestión de residuos |
26. Monitorización energética y gestión de consumos de instalaciones municipales |
27. Intervenciones en edificios e instalaciones municipales |
28. Incorporación de criterios de sostenibilidad en la contratación municipal |
29. Adaptación al Cambio Climático. Madrid + Natural |
30. Sensibilización ambiental y cooperación con otras administraciones |
Así se hizo
El Plan A de Calidad del Aire y Cambio Climático se ha elaborado con la premisa de contemplar la participación ciudadana desde su génesis, alcanzando acuerdos con los diferentes agentes socioeconómicos, sindicales y políticos para conseguir un plan donde la ciudadanía se vea representada.
El borrador fue presentado en noviembre de 2016 y se publicó para permitir un debate ciudadano abierto en torno a las medidas. También se abrió un periodo de información pública, en el que se estudiaron 244 alegaciones al plan. Fue aprobado definitivamente el 21 de septiembre de 2017.
Para el seguimiento se cuenta con grupos especializados en la materia: la Comisión de Calidad del Aire y su ponencia técnica. El plan contempla, además, crear un mecanismo que promueva la colaboración activa de responsables municipales en los siguientes departamentos claves: planeamiento urbanístico, movilidad, gestores energéticos, contratación municipal, divulgación y sensibilización ambiental y ejecución de contratos de gestión ambiental.
Presupuesto
El presupuesto del Plan A no está estructurado de una manera cerrada y rígida. A continuación se detalla una primera estimación para los primeros años de desarrollo que se complementarán con líneas de financiación derivadas de las políticas europeas, nacionales y autonómicas en materia de cambio climático y calidad del aire.
- Actuaciones sobre la red viaria y el espacio público dirigidas a reducir la intensidad del tráfico privado y a la promoción de modos activos de movilidad: 154 millones de euros.
- Actuaciones sobre el parque móvil y la ordenación de sectores claves en los patrones de movilidad en la calidad del aire: 330 millones de euros.
- Gestión urbana de bajas emisiones y eficiencia energética: 46 millones de euros.
- Gestión energética en edificios e instalaciones municipales: 3,2 millones de euros.
- Estrategias de adaptación y soluciones basadas en la naturaleza: 7,7 millones de euros.
- Sensibilización y educación ambiental: 3 millones de euros.
Total: 543,9 millones de euros.
¿Cómo se evalúa?
Para realizar el seguimiento del plan se definen tres tipos de indicadores: de impacto, asociados a los objetivos generales; específicos, que evalúan la incidencia real de las acciones ejecutadas en su conjunto; y de proceso, que valoran el grado de ejecución de las medidas.
El cumplimiento del plan, sobre la información obtenida de los indicadores citados, se analizará y evaluará periódicamente para conocer tanto el grado de progreso en la implementación de las medidas, como el efecto de las mismas sobre la calidad del aire, la mitigación de emisiones de gases de efecto invernadero y la adopción de medidas de adaptación al cambio climático.
La evaluación del efecto esperable de las medidas incluidas en el plan debe realizarse de forma diferenciada teniendo en cuenta la naturaleza de las mismas, el sector en el que se encuadran y los contaminantes de interés.
En el caso de los principales compuestos relevantes para la calidad del aire, como el dióxido de nitrógeno o las partículas, el objetivo final es determinar cuál será la concentración resultante en el aire ambiente para el conjunto de la ciudad, lo que implica hacer una simulación de la calidad del aire. Dada la complejidad de este ejercicio y la necesidad de incorporar los efectos combinados y posibles sinergias de todas las medidas, en primera instancia se plantea realizar una estimación, del efecto previsible de cada medida en términos de emisiones, como indicador de la contribución de cada medida para mejorar la calidad del aire y la mitigación del cambio climático.
El análisis se completará con la estimación del impacto de la contaminación atmosférica en la salud de la población de Madrid.