4. Cómicos

Del apunte al pespunte: confección del apunte teatral

El "repartimiento" o relación de actores se suele registrar en el verso de portada o en la primera hoja del cuadernillo, a continuación del título, con la indicación de los actores que participaron en una función concreta. En el apunte del sainete Un loco sabe de todo, figura el reparto con correcciones, lo que indica que el apunte fue reutilizado por lo menos en dos ocasiones. En 1778 interpretan papeles actores como Espejo, Chinita o Polonia Rochel,  y en 1807 vemos en el reparto, en su lugar, a afamados artistas del Teatro de  la Cruz, como Antonio Soto, Mariano Querol, de gran y dilatado éxito en su época, o Josefa Virg, muy elogiada por la crítica y alabada por el público.

En otros casos se anota la relación de personajes y el reparto apuntado por papeles que interpretaban: galán 1º, normalmente representado por el director de la compañía; sobresaliente; sustituto del galán 1º; barba, papel de anciano; dama 1ª, 2ª...

Era el primer galán quien se hacía cargo de los ensayos recitando el texto para unos actores que en su mayoría no sabían leer ni escribir y aprendían el oficio por contagio.

Las compañías de los teatros de Madrid se formaban durante la cuaresma y la temporada se extendía desde el miércoles de Resurrección hasta febrero o marzo del año siguiente. Las listas se publicaban en el Diario de Madrid y estaban constituidas por alrededor de veinticinco o treinta personas entre actores, autor teatral, tres o cuatro apuntadores, un compositor de música y diversos operarios: tramoyista, guardarropa, cobrador...

El actor y director Isidoro Máiquez participó de forma destacada en la vida teatral madrileña entre  finales del siglo XVIII y principios del XIX. En la biografía que le dedica José de la Revilla, Vida artística de Isidoro Maíquez, podemos ver su retrato, en una estampa de Rafael Esteve sobre  dibujo de Goya.

De forma similar a otros gremios profesionales de la época, que se acogían a congregaciones y cofradías bajo la advocación de algún santo protector, los actores se asociaban bajo la Congregación de nuestra Señora de la Novena, que tenía su sede en la Parroquia de San Sebastián de Madrid. Un impreso con las cuentas de su Enfermería formaba parte de la encuadernación del apunte de la comedia La judía de Toledo, de Antonio Mira de Amescua, del que últimamente se ha desglosado.

Subir Bajar