Puente de Toledo
Los jardines del Puente de Toledo constituyen una de las áreas mas significativas del Proyecto Madrid Río, ya que se están situados en un enclave de excepcional importancia en el que el llamado "Salón de Pinos" se encuentra con uno de los puentes monumentales de Madrid, de Toledo, construido entre 1718 y 1732.
Los jardines, con una superficie de 40.000 metros cuadrados, aprovechan el puente de Toledo en un doble sentido: Por un lado componen un espacio concebido para ser visto desde lo alto del puente que se convierte en un mirador privilegiado. En este sentido, los jardines ofrecen una nueva e inédita panorámica de Madrid ya que sus trazados dibujan un enorme tatuaje que se extiende como una alfombra sobre la superficie, reproduciendo un motivo figurativo vegetal. Por otro lado, los jardines incorporan el Puente de Toledo, que es una estructura barroca diseñada por el arquitectos Pedro de Ribera, como un objeto al que admirar, al que tocar y bajo el que pasar. Para ello la disposición de los setos de ligustrum, viburnum y laurus está organizada de modo que conforma una serie de líneas que toman cono referencia los jardines barrocos de la época borbónica, aunque están trazadas con un sentido y un lenguaje contemporáneos. Entre los setos se han plantado dos tipos de árbol de hoja caduca Albizias y Liriodendros que abrirán sus copas como parasoles en el caluroso verano de la ciudad. Asimismo en este punto se ha construido un graderío que permite la máxima aproximación a la lámina de agua del río, y la mejor contemplación de los arcos del antiguo puente.