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“Hablar de educación es hablar de oportunidades”. Para el Gobierno de la Ciudad de Madrid la educación es una parte esencial en la vida de las personas y por eso, ha afirmado la teniente de alcalde y concejala de Empleo y Servicios a la Ciudadanía, Ana Botella, “contribuimos decisivamente a mejorar la calidad de la oferta educativa”. El Ayuntamiento ha suscrito hoy un convenio de colaboración con Esenco, que dota de estabilidad administrativa y financiera a esta sociedad cooperativa madrileña para que siga ejerciendo su labor en el colegio Trabenco del barrio de Entrevías-Pozo del Tío Raimundo.

El acuerdo es una manera de apoyar el trabajo que esta entidad desempeña desde 1983, fecha en la que empezó a utilizar las instalaciones del antiguo colegio Enrique Herrero. A través del acuerdo, detalló Botella, el Ayuntamiento se compromete a otorgar a Esenco la concesión de dominio público sobre la parcela donde se encuentra ubicado el colegio Trabenco por un plazo de 50 años. Y le concede una subvención de 300.506 euros para financiar parte de las obras de ampliación realizadas en 1998.

También asume, a través de la Junta Municipal del distrito de Puente de Vallecas, las obras de rehabilitación del centro escolar, y sufragará otros gastos extraordinarios como derramas o reparaciones de gran entidad, necesarias para el buen desarrollo de la labor educativa en el colegio.

Para la responsable municipal, la medida es una buena muestra de cómo la colaboración entre las iniciativas privadas -“aquellas que funcionan bien y complementan a las públicas”- y la administración municipal es beneficiosa para todos los vecinos de Madrid.

Inversión municipal
En esta legislatura el Ayuntamiento ha promovido la construcción de 21 nuevas escuelas de educación infantil en las que ha invertido 42 millones de euros.  En obras de mantenimiento, conservación, mejora y adaptación a las actuales exigencias educativas en los centros escolares ha empleado, aproximadamente, 20 millones de euros anuales en estos cuatro años.

El convenio de colaboración suscrito entre 2002 y 2005 con la Comunidad de Madrid ha permitido reformar y rehabilitar 44 centros escolares públicos de infantil y primaria (CEIP) en ese periodo. A estas actuaciones se han destinado 60 millones de euros, aportados al 50% por las dos administraciones. Botella recordó que las obras han afectado a un 20% de los centros de enseñanza infantil y primaria que existen en Madrid (1 de cada 5). De estas mejoras se han beneficiado cerca de 20.000 alumnos.

El éxito de la experiencia conjunta entre Ayuntamiento y Comunidad, apuntó la concejala, ha desembocado en la suscripción de un nuevo convenio, dotado de diez millones de euros más que el anterior para renovar un mayor número de centros escolares.

La Ciudad de Madrid ha reservado y ha puesto a disposición del Gobierno regional 42 parcelas de suelo dotacional, sobre todo en los nuevos PAUs, para construir escuelas infantiles y centros de educación infantil y primaria, que serán sostenidos directamente con fondos públicos, o mediante concierto educativo.

A lo largo de estos cuatro años, añadió, han aumentado los recursos de apoyo, de los programas extraescolares y complementarios a la enseñanza. De hecho, los presupuestos destinados a Becas de Comedor y al Programa de Absentismo se han duplicado.

Aunque las competencias de educación están cedidas a las comunidades autónomas, recordó Botella, desde el Ayuntamiento “hemos demostrado que se puede hacer mucho por extender a todos las oportunidades de acceso a la mejor educación. Apoyar la variedad de la oferta educativa y ampliar la libertad de elección de centro es una manera muy efectiva de lograr que los chicos con menos recursos económicos dispongan de una justa oportunidad de mejorar su futuro”./