La ilusión vive en la Gran Vía
- El lunes 5 de abril comienza la venta del cupón para el sorteo que se celebrará el día 10
- El cupón es una de las más de cuarenta actividades previstas en este primer semestre para conmemorar un centenario al que todos están invitados
- El trabajo permanente sobre este eje urbano ha dado como resultado un espacio equilibrado, que minimiza los obstáculos visuales y funcionales, y potencia un singular paisaje urbano que en Madrid inauguró un nuevo concepto de ciudad
El alcalde presenta el cupón de la ONCE que conmemora el centenario de la Gran Vía
Desde el lunes 5 de abril, los más de 200.000 vendedores de la Organización Nacional de Ciegos de España (ONCE) comenzarán a vender por todo el país un cupón muy especial para el sorteo del día 10 de abril, dedicado a una de las calles más emblemáticas de Madrid: la Gran Vía. Es la singular felicitación de la ONCE por el primer siglo de la que el alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, ha calificado como "la calle más cosmopolita" de la capital. "Una vez más -añadió- esta organización demuestra su capacidad para identificar los sentimientos, proyectos e iniciativas que despiertan la ilusión unánime de todos los ciudadanos de Madrid".
El cupón conmemorativo es una de las más de cuarenta actividades previstas en este primer semestre para celebrar un centenario al que todos están invitados. El programa -organizado por el Ayuntamiento, los comerciantes, las empresas y asociaciones de la zona- incluye propuestas literarias, culturales, musicales, de ocio, comerciales, gastronómicas, turísticas e institucionales. "Una oferta -resumió el alcalde- abierta a todos los ciudadanos de Madrid, de España y del mundo".
La Gran Vía es un fiel reflejo de la unión entre el ayer y el hoy de una ciudad que se sabe poseedora de un atrayente pasado y muestra "un sincero apego por abrirse a las vanguardias". Esos dos conceptos se materializan en la Gran Vía, a través de sus edificios, comercios, teatros y hoteles en una experiencia que "para los que vivimos en Madrid, se repite y enriquece cada vez que recorremos esta palpitante arteria de la ciudad".
Más que una calle
La Gran Vía es más que una calle, forma parte de una imagen que identifica a Madrid en el mundo. Nació con una irrenunciable vocación por la modernidad, que cien años después permanece intacta. Pero también es un espacio público, patrimonio de todos, como recordó Ruiz-Gallardón para resumir los esfuerzos del Gobierno municipal por hacerla "más bonita, más transitable, más accesible y más universal".
Después de la remodelación integral que se ejecutó en 2001, el trabajo ha continuado para aprovechar al máximo su superficie, aumentar su calidad, revitalizar su comercio, mejorar la movilidad y recuperar espacios para el peatón. "El resultado es -constató el alcalde- una calle más universal en todos los sentidos".
Universal y abierta a todos. Por ejemplo, en atención a los discapacitados visuales se ha instalado un pavimento en las aceras que presenta variaciones en su diseño en sectores como las bandas de aviso frente a los pasos de peatones y bocas de metro; o unos pasos de cebra en los cruces menos importantes que respetan el nivel de la acera para favorecer la circulación peatonal frente a la rodada y suprimir las barreras arquitectónicas.
La remodelación ha abarcado las calles del entorno como Silva, Jacometrezo, Preciados, San Bernardo, Cuesta de Santo Domingo, Red de San Luis, Montera, Fuencarral o las plazas de Callao y Santo Domingo. "Hemos definido un espacio más accesible gracias a rebajar los bordillos, reordenar el mobiliario urbano o instalar alcorques adaptados. Además, las nuevas zonas peatonales y la ampliación de las aceras han permitido crear itinerarios-guía para las personas con discapacidad visual, como en el caso de Callao".
El resultado de este esfuerzo es un espacio equilibrado, que minimiza los obstáculos visuales y funcionales, al tiempo que potencia un singular paisaje urbano que en Madrid inauguró un nuevo concepto de ciudad./