Promoción de medios de vida sostenibles en 6 aldeas de Zantièbougou, Mali
Mariam Togola, de la aldea de Zantièla, recoge las zanahorias cultivadas en su parcela.
En el marco de recuperación de los impactos socioeconómicos de la Covid-19, desde la igualdadde género y protección de los derechos de la infancia, el Ayuntamiento de Madrid financió un proyecto que está mejorando los medios de vida, la nutrición y los derechos de 1.394 productores/as, especialmente mujeres, de la comuna de Zantiébougou, en Bougouni (Mali).
Son objetivos que se están consiguiendo mediante medidas como el aumento de la producción de cereal y el acceso de las mujeres a los recursos, mejorando el sistema de prevención de crisis alimentarias, promoviendo la autonomía económica de las mujeres, reduciendo el trabajo infantil y fomentando el derecho a la educación, así como medidas de adaptación al cambio climático.
Tras 12 meses de ejecución del proyecto, la población de Mali se muestra muy comprometida a pesar de la crisis sociopolítica de la zona y las amenazas ambientales: la degradación del suelo por el abuso de fertilizantes y otros productos químicos, así como la falta de lluvias, que amenaza y socava los medios de producción en la zona.
Para solventar este problema, los/as titulares de derechos, siempre en el centro de las actividades, reciben formaciones teóricas y prácticas para la gestión y aprovechamiento adecuado y sostenible de sus recursos productivos. También se les ha dotado de materiales e insumos, y han sido acompañados y asesorados por el equipo del proyecto y los servicios técnicos del Estado, como el de Agua y Bosques, de Agricultura, y Ganadería.
El proyecto tiene además un marcado enfoque de género, y desarrolla actividades de formación y sensibilización para la promoción de la autonomía y derechos socioeconómicos de las mujeres, así como también promueve el respeto del derecho de los niños y niñas a la educación y a tener una infancia libre de trabajo y violencia. Para ello se han puesto en marcha escuelas pasarelas y sensibilizaciones comunitarias sobre los daños del trabajo infantil en el adecuado desarrollo de los/as niños/as y la comunidad en general.
Gracias a la financiación del Ayuntamiento de Madrid, CONEMUND y su socio local, la ONGD ADAF/Gallé, se realizaron 12 movilizaciones sociales y se emitieron 13 spots radiofónicos en la radio local Camara FM de Koumantou a fin de sensibilizar e informar sobre los derechos socioeconómicos de las mujeres que llegaron a todas las aldeas del proyecto.
“Hemos comprendido la importancia de la contribución de las mujeres a la economía familiar”
Como prueba del efecto positivo que estos mensajes pueden tener en las personas, y de cómo pueden contribuir al despertar de las conciencias, se recogen los siguientes testimonios:
En la aldea de Zantièla, la esposa del jefe de la aldea dice que: “Mi marido, a pesar de su estatus social, ha comprendido la carga de trabajo que tienen las mujeres en el hogar y ahora me ayuda recogiendo él mismo la leña”.
En la aldea de Fala, Chitapha Coulibaly aporta su propio ejemplo, “Ayudo a mi mujer en las tareas del hogar cuidando a los niños. Invito a todos los hombres a tomar conciencia de la carga de trabajo de sus mujeres y a compartir las responsabilidades en beneficio del desarrollo de toda la familia”.
Karim Koné, portavoz del jefe de la aldea de Sidio, comparte también su testimonio:
"Gracias por estar a nuestro lado. Nuestro sincero agradecimiento por vuestro apoyo. Hemos aprendido que la estabilidad del hogar depende de la autosuficiencia alimentaria, y hemos comprendido muy bien, la importancia de la contribución de las mujeres a la economía familiar. Por último, prometemos que en los años venideros nos citarán entre los pueblos que se han desarrollado y deseamos y apoyaremos la sostenibilidad del proyecto”.
Una segunda oportunidad para la infancia
Alumnos/as en la escuela pasarela de Sidio haciendo uso de las mascarillas proporcionadas por el proyecto y atendiendo la lección
En cuanto a los derechos de los niños y niñas y especialmente, a la reducción del trabajo infantil, CONEMUND junto a la ONGD CAEB ha puesto en marcha escuelas pasarela que ofrecen una segunda oportunidad a alumnos de entre 8 y 12 años que no han ido nunca a la escuela o que la abandonaron prematuramente.
Las escuelas pasarela son una iniciativa esencial para reintegrar en el sistema educativo formal a los niños que han abandonado los estudios. Para lograrlo, el proyecto ha abierto este año tres centros en las aldeas de Zantiéla, Falaba y Sidio, recibiendo hasta ahora a 94 alumnos, 57 de los cuales son niñas y 37 niños.
Esta actividad formativa se complementa con sensibilizaciones en estas escuelas y en la comunidad en general para promover la conservación del medio ambiente, y concienciar de manera especial a los jóvenes sobre la necesidad de preservar y promover acciones respetuosas con el medio ambiente.