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Facilitar la inserción laboral de jóvenes extranjeros de 18 a 21 años que llegan a la capital sin acompañamiento familiar es el principal objetivo del Programa Integral de Prevención de Situaciones de Exclusión Social para Jóvenes Inmigrantes que realiza el Ayuntamiento de Madrid desde 2001, en colaboración con la entidad Mercedarios Provincia de Castilla Comunidad. La iniciativa cuenta este año con un presupuesto de 318.600 euros y la colaboración de 30 personas con experiencia en el trabajo con población emigrante -diez profesionales y veinte voluntarios-. La Delegada de Familia y Servicios Sociales, Concepción Dancausa, los ha visitado esta mañana.

El Ayuntamiento de Madrid, al margen de la responsabilidad de otras administraciones, se adelanta a prestar ayuda y asistencia a los jóvenes que llegan a la capital desorientados, sin formación ni medios y cuyas expectativas se ven frustradas a su llegada a la ciudad por distintas circunstancias. El choque cultural, el desconocimiento del idioma o la dificultad de acceder a un empleo conducen a estos jóvenes, al alcanzar la mayoría de edad, a una delicada situación de desamparo.

La Ciudad de Madrid ha suscrito un convenio con la entidad Mercedarios Provincia de Castilla Comunidad con el fin de proporcionar equipamientos de la red de Servicios Sociales y prestar servicios básicos a jóvenes de entre 18 y 21 años, que no están acompañados de sus familias y se encuentran en situación de vulnerabilidad. Actualmente existen tres viviendas en el distrito de Salamanca, en las calles de Colomer y de Francisco Santos, con veinte plazas para ellos. Diez profesionales y veinte voluntarios -psicólogos, abogados, educadores, trabajadores sociales y profesores- intervienen en este plan de ayuda.

Durante el primer semestre de 2007, se han beneficiado de este programa 62 jóvenes, de los cuales 27 han sido acogidos y 35 están en seguimiento. La mayoría de estos jóvenes cuenta dieciocho años de edad y son de origen marroquí. El Ayuntamiento ha incluido el Programa de Integración de Jóvenes en el  Plan Madrid de Convivencia.

Eficacia y autonomía
Este programa atiende a un promedio anual de 25 jóvenes, a los cuales se les ofrece atención en las necesidades básicas -alojamiento, manutención, asistencia sanitaria- y se les incorpora a actividades formativas, de ocio y tiempo libre. También se les ofrece un seguimiento de causas penales y regularización de su situación, con el objetivo de que sean capaces de incorporarse con eficacia y autonomía a la sociedad madrileña.

Por último, se realiza un seguimiento de los jóvenes una vez que dejan los pisos. Seguimiento que se intensifica en el primer año con la orientación laboral y la renovación de documentos, apoya en las causas penales y seguimiento en prisión./