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El alcalde de la Ciudad, Alberto Ruiz-Gallardón, acompañado por la concejala de Urbanismo, Pilar Martínez, ha visitado hoy las obras de mejora del Eje Prado-Recoletos. En un acto al que también ha asistido el arquitecto Rafael Moneo, autor de la urbanización del entorno del Museo del Prado, Ruiz-Gallardón ha recorrido esta zona, ha comprobado el desmantelamiento de la gasolinera de la plaza de Neptuno, y ha visitado la nueva plaza de Las Letras, junto al edificio de Caixaforum./

Es uno de los proyectos que mejor simboliza el nuevo modelo de ciudad en el que trabaja el equipo de Gobierno que lidera Alberto Ruiz-Gallardón. En el Eje Prado-Recoletos, el Ayuntamiento de Madrid no sólo quiere recrear el pasado de uno de los ámbitos de mayor valor histórico, cultural y paisajístico, sino convertir su regeneración en una apuesta de futuro.

El alcalde, que ha visitado hoy  este privilegiado entorno en el que se están llevando a cabo varias intervenciones urbanísticas, ha hecho hincapié en que no se trata de actuaciones aisladas, sino que todas ellas pertenecen a un proyecto de ciudad cuyo desarrollo es posible: “Durante estos cuatro años hemos sentado las bases, introduciendo un nuevo modelo de movilidad, para aprovechar todo el potencial de museos como El Prado, Reina Sofía o Thyssen-Bornemisza, así como de otros equipamientos culturales, como el edificio Caixaforum, promovido por la iniciativa privada, o el Centro Intermediae, impulsado por el propio Ayuntamiento”.

En este entorno el Ayuntamiento está trabajando en tres ámbitos para conseguir un espacio público en el que el ciudadano y el propio paisaje sean los protagonistas frente a otros elementos asociados con el automóvil.

Entorno del Museo del Prado
El primero de ellos es la urbanización del entorno del Museo de El Prado, donde, a través de un convenio con el Ministerio de Cultura, el Gobierno de la Ciudad está llevando a cabo un proyecto de Rafael Moneo, el mismo arquitecto que ha dirigido su ampliación, para generar un espacio homogéneo y de la máxima calidad urbana.

Gracias a una inversión de 6,5 millones de euros, de los que el 77% son aportados por el Ayuntamiento, se está actuando sobre 13.363 metros cuadrados, de los que el 90% ya han sido remodelados. “Estos trabajos –detalló el alcalde– han permitido crear un espacio de acceso entre la nueva puerta de los Jerónimos y la puerta de Goya, en la parte Norte del Museo, cuyos alrededores, al eliminarse la zona de aparcamiento, se han peatonalizado para facilitar el encuentro, el paseo y el descanso de los visitantes del museo”.

Igualmente, se está peatonalizando otro tramo de la calle Ruiz de Alarcón, para crear una nueva plaza urbana delante de la fachada principal del nuevo edificio del museo. Por último, la adaptación de la calle Casado del Alisal facilitará el acceso de las obras de arte al edificio de la ampliación, y mejorará la comunicación con la nueva puerta del Jardín Botánico. En total, se han instalado más de 4.000 metros cuadrados de nuevo pavimento, se han ajardinado otros 3.909, se han colocado 213 metros lineales de bancos, y se ha plantado 20 árboles, más otras 8.850 plantas de boj, que configuran un bosque sobre el parterre que cubre la parte trasera del museo.

Desaparece el surtidor de gasolina
También se ha eliminado un elemento que, en palabras del alcalde, “además de distorsionar el paisaje urbano, simbolizaba la supremacía del automóvil sobre el ciudadano”: el surtidor de gasolina de la plaza de Cánovas del Castillo, frente a la estatua de Neptuno, que desde hace más de 30 años rompía la armonía del entorno.

“Esta estación de suministro de combustible hoy pasa a la historia, al igual que ocurrió con la situada delante del edificio de Caixaforum. La desaparición de ambas ha sido posible gracias al Convenio suscrito con Repsol-YPF y CEPSA para resituar 12 surtidores del centro, de los que ya se han desmontado 9, y otros 3 lo serán en mayo”, señaló Ruiz-Gallardón.

Plaza de Las letras
La última actuación ha permitido generar un nuevo espacio público en una de las zonas con más alta densidad de edificación. Justo en los límites con el paseo del Prado, el Gobierno de la Ciudad ha creado la plaza de Las Letras, que ocupa el solar de la antigua estación eléctrica incendiada en 2004. Las obras mejorado las condiciones de los edificios afectados por dicho accidente, en los que se han abierto ventanales que mejoran la habitabilidad de las viviendas.

Gracias a una inversión de 765.000 euros se ha creado un ámbito de 550 metros cuadrados en pleno barrio de Las Letras, bajo el cual se ha construido una sala para actividades culturales de 260 metros cuadrados y al que se asoman dos nuevos equipamientos.

Uno de ellos es el Caixaforum, promovido por la iniciativa privada y diseñado por los arquitectos Herzog y de Meuron; y el otro es el edificio que albergó la Serrería Belga, que tras una inversión de 3 millones de euros se incorporará al proyecto cultural Intermediae, impulsado por Las Artes, y del que también forma parte el Matadero. Para la rehabilitación de sus 3.435 metros cuadrados, que estará concluida en 2009, se convocó un concurso, cuyos trabajos se exponen hoy en la nueva sala ubicada bajo la plaza de las Letras. El proyecto ganador es el de los arquitectos María Langarita Sánchez y Víctor Navarro Ríos, que respeta el carácter industrial de las antigua Serrería./