Portal web del Ayuntamiento de Madrid

"El único fracaso es rendirse". Con esta frase del alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, Madrid 2016 ha afrontado hoy la cita más decisiva desde que hace algo menos de cuatro años iniciara su carrera olímpica. En Copenhague, la delegación española, liderada por el rey, Don Juan Carlos, ha aprovechado su última oportunidad para convencer a la Asamblea del Comité Olímpico Internacional (CIO) de que su apuesta era la mejor.

Y lo ha hecho, además de con el Rey y el alcalde, con  la presencia del presidente del Gobierno, José Luis Rodríguez Zapatero; de la presidente regional, Esperanza Aguirre; del presidente de Honor del CIO, Juan Antonio Samaranch y del presidente del Comité Olímpico Español, Alejandro Blanco; del miembro del CIO, Juan Antonio Samaranch junior, y de la consejera delegada de Madrid 2016, Mercedes Coghen. Todos ellos, arropados por la estatura deportiva de Raúl González y Teresa Perales y de una promesa, Mónica Figar, hija de Mercedes Coghen, jugadora de hockey como su madre y con  un doble sueño: subir al podio y hacerlo en Madrid 2016. La reina Doña Sofía, como ya lo hizo en Singapur, ha testimoniado con su presencia el apoyo incondicional al sueño olímpico madrileño.

Los vínculos de la familia real con el movimiento olímpico han centrado la intervención del monarca quien ha ratificado ante el CIO el respaldo total que suscita Madrid 2016 en toda la sociedad española. Don Juan Carlos expresó a la Asamblea su orgullo por estar de nuevo entre la familia olímpica y por formar parte de lo que calificó de "maravilloso proyecto". "Hemos participado en varios Juegos Olímpicos. Una hija mía, la Infanta Elena, es la presidenta de honor del Comité Paralímpico Español y algunos de mis nietos ya se han presentado como voluntarios para Madrid 2016".

El monarca que, en sus palabras, confesó apoyar a Madrid 2016 con todo su corazón, se dirigió a los miembros del CIO asegurando que "un voto por Madrid es un voto por el éxito de los Juegos", un voto que servirá para difundir los valores olímpicos por todo el mundo y para conseguir, a través del deporte, mayor comprensión, solidaridad y amistad entre los pueblos. "Estoy convencido -dijo-, de que el mundo será un lugar mejor para vivir después de Madrid 2016".

Experiencia, seguridad, fiabilidad

Rodríguez Zapatero transmitió su garantía personal y la del Gobierno que preside de la solidez del proyecto olímpico, un símbolo perfecto de un país "que cree que los Juegos encarnan el respeto a la diversidad, la integración armoniosa de las naciones y de las culturas a través del gran valor universal del deporte".

Para Rodríguez Zapatero es, ante todo, una candidatura segura, con el 77% de las sedes deportivas preparadas, por sus grandes infraestructuras y la garantía que ofrece España a la hora de organizar con brillantez grandes eventos deportivos. Y además es una candidatura unida políticamente y popularmente.

El presidente anunció ante los miembros del CIO "el compromiso de España  para poner en marcha un Plan de apoyo y extensión del deporte para los jóvenes que más lo necesitan de aquellos países que más esperan de nosotros. El Olimpismo es también que ningún niño encuentre limitaciones para practicar deporte". Y para ello, Rodríguez Zapatero incluirá en la agenda de la Presidencia de España en la Unión Europea como prioridad el fomento del deporte y los valores olímpicos así como la convocatoria en abril de 2010 de un gran Foro de Encuentro de los gobiernos con el CIO y el conjunto del sistema deportivo.

Compromiso para triunfar

Tras felicitar a las ciudades rivales por sus proyectos, el alcalde justificó el tercer intento madrileño de alzarse con la sede olímpica. "En el deporte el único fracaso es rendirse. Tengo la certeza de que siempre se puede aprender del pasado si se cuenta con la determinación y el compromiso para triunfar. Y nosotros lo tenemos".

Una determinación que ilustró muy bien Ruiz-Gallardón al recordar cómo ha vivido durante estos años el empeño olímpico de su ciudad. "Los madrileños me encargan que les represente y en su nombre me he dedicado a seguirles a ustedes, bueno casi diría que a perseguirles, a lo largo de los cinco continentes para hablarles de la visión de Madrid".

Esa intensa implicación se convirtió en un compromiso de futuro al asegurar Ruiz-Gallardón a la Asamblea que, en caso de elegir a Madrid, tanto él como el equipo actual de la candidatura seguirán involucrados en el proyecto durante los próximos siete años.

El alcalde resumió así a la familia olímpica las cartas con que juega Madrid: "ofrecer un proyecto excelente, basado en los principios de la Carta Olímpica y apoyado en las personas, en nuestras familias, nuestra gente, que provienen de 180 nacionalidades diferentes. Una cultura diversa que convive feliz en Madrid". Los Juegos de 2016 permitirán precisamente a Madrid seguir dando "oportunidades y promoción a cuantos vienen a Madrid a construir su proyecto de vida, transformando la ciudad en un lugar mejor para vivir, trabajar, competir y visitar".

Con la experiencia y las emociones de Barcelona 92, Mercedes Coghen confesó haber afrontado su cargo al frente de la candidatura madrileña. Entonces como capitana del equipo de hockey "nos comprometimos, hicimos muchos sacrificios y ¡teníamos un poquito más de ganas de ganar que los demás! Cuando nos subimos en el último escalón del podio, supinos que nada podría volver a ser considerado imposible porque confiábamos en nosotras. Podrán imaginarse cuantas veces el recuerdo de ese día ha venido a mí en los últimos tres años para ayudarme".

La consejera delegada de Madrid 2016 reiteró a la Asamblea de CIO su confianza en que "los Juegos nos ayudarán a crear un estilo de vida en el que el deporte, el trabajo en equipo y el respeto hacia los demás serán parte integrante de la vida en común. Una visión que coloca a la gente en el corazón del proyecto".

Las personas, los atletas, los protagonistas

Tanto la presidente de la Comunidad de Madrid, Esperanza Aguirre, como el del COE, Alejandro Blanco,  resaltaron la importancia del factor humano a la hora de concebir los Juegos de 2016. "Nuestro objetivo es que los Juegos mejoren la vida cotidiana de nuestros ciudadanos", subrayó Aguirre tras asegurar que "estamos convencidos de la importancia de un proyecto sostenible que contribuya a desarrollar nuevas entidades económicas con responsabilidad medioambiental y de progreso social".

Blanco, por su parte, puso especial acento en los atletas. "Hemos estudiado y aprendido de todos los juegos, hemos hablado con atletas de de todo el mundo. Nuestro objetivo es que cada atleta pueda alcanzar su máximo nivel tanto en lo personal como en lo deportivo", aseguró.

Conseguirlo pasa por mejorar la accesibilidad, aumentar el número de patrocinadores, disminuir el tiempo de los desplazamientos o construir una villa olímpica sostenible

Equipo apasionante y trabajador

Tres años con el corazón puesto en un proyecto. Tres años viviendo una experiencia enriquecedora. Juan Antonio Samaranch Jr., poco antes de pasarle la palabra al alcalde de Madrid, resumía así sus vivencias durante este tiempo de sueño compartido. 

Convencido de que los Juegos de las Personas son la mejor definición de Madrid 2016 "porque su filosofía ayudará a Madrid a convertirse en una ciudad mejor y construir un mundo mejor para las generaciones venideras",  Samaranch Jr., agradeció a los miembros del equipo su esfuerzo, destacando los principales aportes de cada uno: del alcalde, "su compromiso y dedicación totales"; de Coghen, "su liderazgo"; de Aguirre y Zapatero, "su apoyo total y aliento"; de Lissavetzky, el "ser uno de los mejores defensores del ideario de Madrid 2016; de Blanco, "su trabajo en equipo"; de la Infanta Doña Pilar, "sus sabios consejos". Sin olvidar a los deportistas que han apoyado sin fisuras la candidatura, Samaranch Jr. dio las gracias al rey "que representa a nuestra nación y a una excepcional familia olímpica".

Su padre, Juan Antonio Samaranch, presidente de honor del CIO, dedicó también parte de su intervención a la figura de Don Juan Carlos, a quien definió como "un apasionado del deporte" y gran conocedor de "lo que es el movimiento olímpico porque tomó el juramento olímpico en Munich '72, compitiendo con otro gran deportista, Jacques Rogge, presidente del CIO". "En la persona del Rey Juan Carlos I -añadió- se simboliza el compromiso de todo el deporte español con los valores del ideal olímpico"./