Ciudades y desarrollo humano, un debate sobre el futuro de las urbes
- El mayor desafío de las ciudades es propiciar un desarrollo humano integral
- El alcalde reclamó más recursos financieros y normativos para los gobiernos locales, que permitan afrontar los desafíos educativos, ambientales, de movilidad y de desarrollo
“Las carencias y los desafíos que debe afrontar todavía la humanidad justifican los esfuerzos que el Club de Roma viene desarrollando desde hace cuatro decenios para aportar las soluciones que puedan mejorar la vida de millones de personas”. Con este reconocimiento comenzó el alcalde de Madrid, Alberto Ruiz-Gallardón, su conferencia sobre “Las ciudades y el desarrollo humano” en la cita anual de esta organización. Tras recordar que esta prestigiosa entidad fue de las primeras voces en abogar por un desarrollo respetuoso con el medio ambiente, el alcalde señaló que sus actuales planteamientos -la preocupación por la sostenibilidad, la superación de la violencia y la exclusión social- “coinciden plenamente con la gran empresa de convivencia que Madrid se afana en impulsar”.
“El mayor desafío de nuestros días consiste en encontrar una forma de crecimiento que no origine más problemas que los que resuelve”. Son palabras del sociólogo y politólogo Ralf Dahrendorf, premio Príncipe de Asturias de Ciencias Sociales, citadas por el alcalde, quien añadió que “una vez asumido que el crecimiento no es una pretensión ideológica, sino una tendencia de las comunidades humanas, una aspiración y un derecho, el reto no consiste en aceptarlo o rechazarlo. El reto es garantizar que sirve a un desarrollo humano integral”. Este objetivo es más acuciante en las ciudades, explicó, porque por primera vez en la historia la mayoría de la población reside en ellas y se han convertido en “sinónimo de prosperidad, complejidad y tensiones”. La magnitud de los flujos migratorios mundiales, que Madrid está experimentado, es el mejor testimonio de ese trasvase”, comentó.
Aunque esta nueva realidad plantea a las ciudades necesidades y situaciones inéditas, Ruiz-Gallardón sostiene que “las dota de un poderoso aporte humano, cultural y económico”. Defendió la ciudad como un espacio de oportunidades que proporciona prosperidad, seguridad y sentido, pero matizó que hay una condición para que su crecimiento no frustre estas aspiraciones: “que las grandes aglomeraciones humanas se organicen conforme a una naturaleza verdaderamente urbana”.
Más recursos financieros
El desarrollo humano está íntimamente vinculado a la agenda urbana. Por eso, el alcalde reclamó más recursos financieros y normativos para los gobiernos locales, que permitan afrontar los desafíos educativos, ambientales, de movilidad y de desarrollo. Ante el reto que tienen las ciudades, recordó que Madrid “está trabajando para llamar la atención de los gobiernos nacionales y los organismos multilaterales”. Un empeño en el que se ha logrado involucrar a la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE), en cuya última conferencia en Estambul el alcalde solicitó la elaboración, por parte del mundo académico e institucional, de indicadores de desarrollo humano que se ajusten a las circunstancias de quienes habitan la ciudad, a menudo mal reflejadas por indicadores clásicos como el PIB.
El alcalde argumentó que Madrid ya ha empezado a proporcionar respuestas cuyos resultados se aprecian en el paisaje urbano y que la han situado a la vanguardia del continente. De hecho, es la tercera capital más próspera de Europa, a la cabeza de la Unión junto a Londres y París. Apuntó que “Madrid es el vivo ejemplo de cómo el dinamismo de los Estados depende hoy de sus ciudades: el 11 % de la riqueza española generada desde Madrid es un indicador de este protagonismo”. Destacó también que es una metrópoli cosmopolita, habitada por tantos ciudadanos como las presentes en Naciones Unidas, y volcada en un modelo de convivencia intercultural que está permitiendo evitar tensiones y acentuar el entendimiento.
Anticipación
“El Gobierno de la Ciudad se ha esforzado en anticipar las necesidades que el crecimiento plantea mediante unas infraestructuras de calidad”, declaró Ruiz Gallardón y puso un ejemplo: el proyecto de la M-30. La modernización del principal anillo distribuidor de tráfico rodado ha generado 60.000 empleos, ha incrementado en 3.000 millones de euros el Valor Añadido Bruto de la ciudad, ha ahorrado 35.000 toneladas anuales de gases de efecto invernadero y ha recuperado el eje vertebrador del río como gran corredor verde en el que surgirá un parque de un millón de metros cuadrados.
La apuesta por el centro urbano evitando que se convierta “en un simple parque temático del pasado”, una política orientada hacia el transporte público, el medio ambiente y los servicios sociales refuerzan en la actualidad, declaró Ruiz-Gallardón, los aspectos relacionados con el desarrollo humano. “Nuestra aspiración de organizar los Juegos Olímpicos de 2016 representa un paso más en esa mirada humanista sobre el ámbito urbano”, apostilló el alcalde./