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Una ciudad dentro de la ciudad y un auténtico motor de progreso social y cultural de Madrid. Es la Ciudad Universitaria, declarada Conjunto Histórico Artístico en 1983 y Bien de Interés Cultural en 1999, un espacio único por su valor arquitectónico, urbanístico y ambiental que está de estreno. El alcalde, Alberto Ruiz-Gallardón, ha inaugurado hoy la ampliación de la plaza de Menéndez Pelayo, situada entre las Facultades de Derecho y de Filosofía y Filología, que también han experimentado una importante reforma.

La actuación abarca 28.000 metros cuadrados, de los que 12.000 corresponden a la ampliación de la plaza de Menéndez Pelayo, en la que el Ayuntamiento ha aportado más de 4,3 millones de euros. Este proyecto se enmarca en el Plan Especial de la Ciudad Universitaria, que persigue recuperar las características originales del recinto, proteger su paisaje, definir los nuevos proyectos de construcciones, equipamientos y dotaciones, así como posibilitar su integración en el conjunto de la ciudad.Para facilitar esa protección y evolución del campus el Ayuntamiento de Madrid y las tres universidades (Politécnica, Complutense y Educación a Distancia) integran el Consorcio Ciudad Universitaria.

El alcalde detalló que las dos facultades acaban de ampliarse en 17.000 nuevos m2, gracias a la construcción, por parte de la Universidad Complutense, de dos nuevos edificios dedicados a la docencia. Entre ellos se ha construido un edificio subterráneo que, además de servir de comunicación entre ambos, acoge una biblioteca de 6.000 m2  divida en dos salas, y un aparcamiento con 300 plazas.

Plaza integradora
La obra era una buena oportunidad para crear una gran plaza sobre la biblioteca edificada bajo rasante, en la que el Ayuntamiento de Madrid ha colaborado, a través de su participación en el Consorcio, con más de 4,3 millones de euros.

Los arquitectos Javier Sáenz y Zacarías González han dirigido el proyecto, que ha incluido la instalación de 208 metros de bancos de granito, el ajardinamiento de 5.750 m2, y la integración y conexión del nuevo ámbito, que tiene un desnivel de 10 metros, mediante una gran escalinata y un ascensor panorámico que facilita la accesibilidad a los discapacitados.

Esta nueva plaza alcanza un triple objetivo en palabras del alcalde: integra los dos nuevos edificios construidos por la Universidad Complutense; pone al alcance de los universitarios una nueva infraestructura que articula la comunicación entre diferentes edificios y facultades, y, por último, remata la cornisa de la Ciudad Universitaria en la zona Oeste, ofreciendo unas vistas inmejorables. La actuación amplía los ámbitos de encuentro y conecta con el eje que comienza en la plaza de las Ciencias y continúa por el Paraninfo.

Un campus histórico
Además del valor histórico y ambiental, afirmó Ruiz-Gallardón, la Ciudad Universitaria ejerce una función esencial como centro de investigación, laboratorio de ideas y plataforma de difusión del conocimiento. “Ochenta años después de su creación sería imposible entender el Madrid del siglo XXI sin tener en cuenta el papel que ha desempeñado este campus abierto, que desde su concepción inicial destacó por su equilibrio entre edificaciones y zonas verdes”.

La Ciudad Universitaria ha sido línea del frente en la Guerra Civil y escenario de las primeras reivindicaciones a favor de una España democrática. Por todas estas razonas, argumentó, es fácil comprender la atención y respeto que recibe por parte de las instituciones, no sólo para evitar su deterioro, sino también para recuperar los elementos más valiosos y las características más singulares de esta ciudad dentro de la ciudad.

De sus más de 4,3 millones de metros cuadrados, 1,2 corresponden a zonas verdes. Su población estudiantil asciende a 127.000 alumnos entre las Universidades Complutense y Politécnica, a los que se suman los 171.000 inscritos en la Universidad Nacional de Educación a Distancia. En la Ciudad Universitaria dan clase 11.000 profesores y trabajan otras 7.000 personas. Son datos que “avalan esa condición de ciudad, así como de auténtico motor de progreso social y cultural de Madrid”.

Compromiso municipal
El compromiso de Madrid con la Ciudad Universitaria no se agota en la actuación inaugurada hoy. En el anterior mandato el Ayuntamiento aportó 12 millones de euros al Consorcio, y en 2007 ha superado los tres millones de euros para contribuir a la ejecución de iniciativas como el  acondicionamiento de la Senda Real, el plan integral de saneamiento, la mejora de las conexiones del campus Norte, el catálogo de mobiliario urbano, o la mejora del alumbrado público./