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Ofrecer alojamiento y a poyo  a familias en situación de dificultad con hijos menores a su cargo, carentes de recursos personales y económicos suficientes para su integración, autonomía y desarrollo. Este es el objetivo del Servicio de Atención a Familias en Recursos Residenciales que lleva a cabo Cáritas Diocesana en virtud del convenio que mantiene con el Ayuntamiento y al que éste ha destinado 604.034 euros.
 
El Servicio de Atención a Familias en Recursos Residenciales se enmarca dentro de los Programas de Apoyo y Protección Social a las familias que desarrolla el Ayuntamiento con el fin de dar respuesta a las necesidades detectadas en las familias con problemas de distinta índole. 
 
Las residencias temporales permiten preservar la convivencia familiar con un acompañamiento continuo en alojamientos tutelados. Los objetivos que se pretenden alcanzar son prestar atención residencial a los menores y sus familias, facilitando la convivencia familiar y la asunción de las funciones parentales; prevenir la marginación y exclusión de las unidades familiares, evitando la toma de medidas de protección de los menores; apoyar la inserción social y laboral de las familias, u favorecer la consolidación de la convivencia familiar.
 
Dos tipos de alojamientos

El Servicio de Atención a Familias en Recursos Residenciales se realiza  en dos tipos de alojamiento: 

• Centro Residencial de Atención a Menores y sus Familias Santa María del Parral: atención en 15 unidades residenciales para familias monoparentales, con menores de 16 años a su cargo que se encuentran en situación riesgo moderado o grave y que requieran iniciar un proceso de intervención psicosocial. En 2013 se atendieron a 19 familias, es decir un total de 57 personas, 38 de ellas menores y 19 adultos.
•  Viviendas de Integración Social (VIS) Jubileo 2000 y Sínodo 2005: atención en 34 unidades residenciales para familias con menores a su cargo que se encuentran en situación de riesgo moderado y que precisan de apoyo para completar su proceso de integración y autonomía. Durante 2013 unas 42 familias recibieron esta asistencia, que supuso una atención a 142 personas, 74 de ellas menores y 68 adultos.

 Cada familia sigue un proceso de consolidación y de preparación gradual para su posterior integración. Para ello, se ofrece un seguimiento continuado y una intervención especializada que les permita superar los problemas psicológicos y sociales que presentan a causa de rupturas, disfunciones familiares severas, malos tratos, pobreza y desamparo.
 
El Servicio de Atención a Familias en Recursos Residenciales complementa la amplia Red de Protección a Menores de la que disponen las familias con dificultades, formada básicamente por los Servicios Sociales de Atención Primaria y los Centros de Atención a la Infancia del Ayuntamiento de Madrid./